El value investing es una estrategia de inversión que centra sus análisis en el potencial de valor de las organizaciones a largo plazo, en vez de enfocarse en el precio de mercado actual o en el volumen de transacciones en la Bolsa.
Al aplicarlo con sabiduría, genios como Benjamin Graham, Warren Buffett y Seth Klarman han obtenido grandes resultados, acumulando un enorme patrimonio y manteniéndose resilientes ante diversas situaciones del mercado, inclusive, críticas y desafiantes.
En este post, encontrarás mucha información relevante y valiosa sobre la estrategia, abrazando desde su concepto hasta las ventajas y riesgos derivados de la adopción de la estrategia.
El value investing es una estrategia o filosofía de inversión a largo plazo cuyo objetivo es encontrar buenas acciones en la Bolsa con un precio inferior a su valor intrínseco o real.
Dicho de otra forma, los inversionistas basados en la inversión en valor buscan activos con precios reducidos en comparación con el ideal que puedan valorarse y generar rentabilidades positivas en un largo horizonte de tiempo.
Por ejemplo, un inversor que apuesta en esta filosofía, trata de comprar en la Bolsa una acción que vale 10 por 8 dólares con la expectativa de que, en el futuro, este activo alcance un precio más elevado.
Para evaluar la inversión, la estrategia considera una serie de conceptos relevantes, en especial, sobre la gestión de la contabilidad de un negocio. Así pues, el gran propósito de la estrategia es encontrar el valor intrínseco de la compañía en cuestión.
Ante una mirada práctica, es común que los inversionistas relacionen el concepto con el patrimonio líquido de una organización. Sin embargo, esta dimensión por separado no es suficiente para conocer el valor intrínseco de un negocio, ya que que una gestión deficiente puede echar por tierra los recursos a corto plazo.
Por este motivo, el valor intrínseco también considera cuestiones como:
Esto quiere decir que conocer este indicador requiere una mirada profunda al propio negocio y no solamente al precio del activo bursátil.
Luego de encontrar el valor intrínseco de la compañía, puedes compararlo con el precio actual de la acción. Por ejemplo, si encontraste que una empresa vale USD 50 millones y esta comercializa 5 millones de acciones en la Bolsa. El precio justo para cada acción sería UDS 10.
Al presentar una cotización inferior a ese precio, podemos considerarla como una opción interesante, pues presenta la posibilidad de normalizar su precio y alcanzar el valor intrínseco del negocio generando, de este modo, beneficios.
Para invertir siguiendo esta estrategia debes considerar 3 factores clave:
Antes de adoptar una estrategia de inversión, debes definir tus objetivos financieros considerando el capital que debes aportar y el plazo que necesitas para alcanzarlos.
Es importante que analices las alternativas en materia de estrategias, considerando tu perfil como inversionista, dado que las características indican tu nivel de resistencia a los riesgos derivados de los diferentes tipos de inversión: conservador (menor resistencia), moderado o agresivo (mayor resistencia).
Este tipo de análisis se enfoca en los aspectos financieros de la empresa como su balance patrimonial, deudas, activos, crecimiento, beneficios, entre otros. Estos son relevantes para conocer a detalle el potencial del negocio y, por consiguiente, de las acciones.
Aquí algunos puntos que debes tener en cuenta:
Estos datos te ayudarán a entender si la acción presenta un precio inferior al valor intrínseco y a comparar diversos activos.
Basado en lo que te contamos anteriormente sobre el valor intrínseco, podemos definirlo como el valor real de una empresa. A pesar de que en el mercado ideal ambos serían iguales, no necesariamente el valor intrínseco es igual al valor de mercado.
Hablando sobre el margen de seguridad, consiste en la diferencia entre el precio de un activo y su valor intrínseco. Esto quiere decir que cuanto mayor sea el precio de un activo, menor será su margen de seguridad y viceversa.
No obstante, para que la relación indirectamente proporcional se cumpla, el valor intrínseco no debe variar.
Bajo la estrategia de la inversión en valor, el margen de seguridad es una de las herramientas más relevantes para reducir el riesgo de las inversiones e interfiere netamente en su rentabilidad futura.
De hecho, si seleccionamos un activo con una amplia margen de seguridad, nos protegemos ante el riesgo de:
En lo que se refiere a la rentabilidad futura, si compramos una acción por un precio inferior al valor intrínseco, asegurando una mayor rentabilidad. Por ejemplo, si una empresa vende acciones por USD 50 con una rentabilidad anual de 9% y las compramos por USD 25, nuestra rentabilidad esperada será de 18%, o sea, el doble.
De ahí la importancia de buscar organizaciones con margen de seguridad aceptable y que vayan de acuerdo con tu perfil de inversionista.
¡Seguro hasta este punto invertir usando la estrategia del value investing te suena a una buena idea! A continuación, te contamos más de sus ventajas:
¡Pero no todo son cosas buenas! A pesar de sus aspectos positivos, el value investing también implica ciertos riesgos como:
¡Hasta aquí hemos llegado!
Como ves, el value investing es una estrategia efectiva y prometedora para los inversionistas que centran su atención en el largo plazo.
Por último, solo queremos recordarte que, antes de lanzarte al value investing es recomendable que reflexiones detenidamente sobre:
Luego de considerarlos, podrás identificar el mejor camino para tu trayecto como inversionista.
¿Te interesó este tema? ¡Entonces te invitamos a empezar a invertir!