Las tarjetas de crédito son una gran herramienta financiera si se utilizan correctamente. Si no sabes cómo sacarle el mejor provecho, ¡no te preocupes! Nunca es tarde para aprender a utilizar un crédito de manera que aumente puntos en tu historial.
Con ello, podrás acceder a créditos hipotecarios, grandes oportunidades de inversión con una buena tasa o simplemente organizar las finanzas de tu pyme. ¡Aquí te decimos cómo aprovechar al máximo las tarjetas de crédito!
Un buen historial crediticio abre las puertas a muchas cosas, entre ellas están:
Para lograrlo, es necesario utilizar las herramientas de crédito correctamente. De esta manera, las instituciones financieras sabrán que tienes ingreso y que tu comportamiento es responsable a la hora de pagar un crédito, por lo tanto, confiarán en ti.
Probablemente pienses que las tarjetas de crédito no son para ti, o que saber utilizarlas es muy complicado si no te dedicas a una rama económica. Pero no es así, con esta breve guía, pronto serás un experto y lograrás mejorar tu historial crediticio.
Una buena manera de aprender a utilizar una tarjeta de crédito es informándote sobre las cosas que no debes de hacer. A continuación, te presentamos algunos errores muy comunes que pueden afectar tu historial crediticio, y además, te aconsejamos qué hacer para resolverlos.
Quizá en algún punto de tu vida hayas cometido uno o más de ellos, posiblemente aún los hagas de vez en cuando, pero después de leer este artículo, tu comportamiento financiero será envidiable. ¿Estás listo?
Aunque parezca que el pago mínimo es una manera muy atractiva y cómoda de liquidar tus deudas con pequeños pagos cada mes, la realidad es que podrías estar pagando el doble de tu saldo por intereses en un largo plazo.
Los intereses son el monto que el banco o institución financiera te cobran por prestarte dinero. Y la tasa varía entre cada institución, con esta información puede hacer el cálculo de los intereses que estarías pagando.
Para obtener esta información, presta atención en tu contrato o llama por teléfono a tu banco, ellos te dirán el porcentaje de la tasa que corresponde a tu tarjeta.
Pero, ¿cómo evito los intereses? ¡Muy fácil! Tu objetivo mes a mes tiene que ser liquidar el saldo total de tu línea de crédito para no acumular intereses.
Además, de esta manera estarás sumando puntos a tu historial crediticio al tener un buen comportamiento de pago.
Dependiendo de tu fecha de corte, tu tarjeta tiene una fecha límite de pago. Si líquidas tu saldo después de dicho plazo, serás acreedor a intereses y a una multa por pago tardío, que varía conforme a la institución bancaria.
En adición, esta información repercutirá desfavorablemente en tu historial crediticio. Para evitarlo, programa un recordatorio en tu agenda, o celular, para pagar a tiempo tu tarjeta. Esto también fomentará tus buenos hábitos financieros.
En caso de que seas muy olvidadizo, muchos bancos tienen la opción de pago automático para que nunca se te pase el pago de tu tarjeta.
Lo mismo puede pasar con tus inversiones, así que recuerda que también puedes programar el aporte a tu fondo desde tu banco para que mantengas tu frecuencia.
Sabemos que puede ser muy tentador, pero utilizar el extra límite de crédito de tu tarjeta no es la mejor idea si quieres mantener un buen historial crediticio.
La razón es que para las instituciones financieras, si una persona no utiliza su crédito es porque tiene una buena solvencia económica y, por lo tanto, es bastante confiable.
Por ello, las personas con el mejor historial crediticio solamente utilizan 10% de su límite de crédito. Si necesitas utilizar un poco más, te recomendamos que no sobrepase el 30%.
Aunque no lo creas, contar con una tarjeta de crédito con un límite alto y no utilizarla es una buena manera de incrementar tu calificación del historial crediticio.
Te explicamos cómo, utilizando el concepto de proporción de uso de crédito, una herramienta que utilizan las instituciones financieras para calificar tu historial crediticio.
Se trata de la relación que hay entre tu línea de crédito y el saldo actual de tus tarjetas. Es decir, se calcula el porcentaje que has utilizado de tu capacidad de crédito.
Por esta razón, al tener varias tarjetas con un alto límite de crédito y hacer pequeños cargos en cada una, el porcentaje de uso de crédito será menor, en comparación a solo contar con una tarjeta.
Tener varias tarjetas de crédito no es malo, lo perjudicial es solicitarlas al mismo tiempo. Así que lo más recomendable es que dejes pasar un tiempo entre la solicitud de un crédito y otro.
Esto se debe a que cada vez que presentas una solicitud para obtener un crédito, los prestamistas o instituciones bancarias revisan tu historial crediticio para obtener una idea de tu comportamiento financiero y confiabilidad.
Si presentas muchas solicitudes a la vez, la constante revisión de tu historial puede dar una falsa idea de que no tienes solvencia económica y estás obteniendo préstamos para pagar los anteriores.
Para los grandes gastos de tu vida (esos que requieren que uses todo el cupo de tu tarjeta de crédito y más), recuerda que lo mejor es prepararse con anticipación, ahorrar y hacer que ese ahorro se rentabilice en el tiempo.
Presta atención a estos detalles y descubre que las tarjetas de crédito son una increíble herramienta financiera para obtener grandes beneficios.
Adicionalmente, te recomendamos no tenerles miedo y estar atento a tus fechas de pago para liquidar tu saldo.
Si hoy ya tienes un poquito de plata guardada en tu cuenta corriente y quieres ponerla a trabajar por ti, un fondo ahorro podría ser una buena opción.
¿Aún estás nervioso por los intereses? Te invitamos a conocer sobre estrategias de inversión adecuadas para conocer el lado bueno de ellos. ¡Los fondos de ahorro son ideales para aquellos inversionistas que buscan preservar sus ahorros y generar rentabilidad!