Existen gastos inesperados que no están definidos en nuestro presupuesto, pero que son inevitables. Un problema de salud, una falla en el auto o la reparación de algún electrodoméstico del hogar. Este tipo de gastos son los que podrías cubrir con un fondo de emergencia, sin la necesidad de afectar tu presupuesto mensual y complicar tu bolsillo.
“Fondo de emergencia” es una de las principales metas que se proponen quienes invierten a través de los fondos mutuos de Clever, evidenciando la preocupación que existe por tener un “colchón” para enfrentar esos gastos inesperados.
Una emergencia es algo inesperado y también urgente. Es un gasto que deberás cubrir a la brevedad: problemas de salud o tratamientos médicos, fallas en el auto o en algún electrodoméstico del hogar o incluso quedarse sin trabajos y, por ende, sin ingresos.
No confundas las emergencias con los gastos irregulares, por ejemplo, la Navidad, que es una fecha en que tus gastos pueden aumentar, pero que siempre está presente en el calendario y, por lo mismo, pudiste planificar con anticipación.
¡No te tiendes! Aunque en algunos momentos sea muy tentador utilizar ese dinero para algunos gastos, recuerda que el objetivo de este fondo es poder financiar alguna emergencia, sin la necesidad de endeudarte o tener que sacrificar tu presupuesto.
Recuerda diferenciar tu fondo de emergencia de tu ahorro mensual ¿Por qué? Si recurres a tu ahorro mensual para sobrellevar las emergencias te irás alejando de tus metas ¡Esas vacaciones soñadas se irán alejando!
Aquí debes considerar distintos factores:
• Seguridad: recuerda que este dinero está destinado a cubrir emergencias, por ende, deberá estar guardado en instrumentos financieros seguros.
• Fácil acceso: los imprevistos pasan de un momento a otro, sin avisar, por ello deberás mantener ese dinero en un instrumento que te permita acceder a él fácilmente y en un corto plazo.
Entonces, en ¿qué tipo de instrumentos financieros puedo guardar el dinero de mi fondo de emergencia? Aquí puedes considerar una cuenta de ahorro, una cuenta vista o incluso fondos mutuos conservadores, donde tu dinero.
La respuesta a esta pregunta dependerá de tus ingresos y tus gastos mensuales. No te podemos decir un monto exacto, pero sí ayudarte con las variables que debes considerar para calcular el monto que deberías considerar en tu fondo de emergencia.
Recuerda que una emergencia es algo inevitable, imprevistos que escapan de tu presupuesto mensual, pero que igualmente debes cubrir, como una emergencia de salud, alguna falla en el auto o algún desperfecto en la casa o incluso quedarte sin trabajo de manera repentina. En tal caso, la recomendación es que el fondo de emergencia te permita cubrir alguna de estas emergencias.
Puedes partir estableciéndote una meta, por ejemplo, en un año ahorrar el equivalente a un sueldo mensual o a los ingresos que generas en un mes.
También puedes establecer metas que te permitan saber cuánto dinero tener en tu fondo de emergencia:
1. El monto necesario para cubrir una falla mecánica del auto, el deducible del seguro o quizás reponer alguno de los electrodomésticos más caros que tengas en el hogar, como el refrigerador, el televisor o la lavadora.
2. Una emergencia de salud ¿cuánto necesitarías para cubrirla en base a la cobertura de salud que posees?
3. Estar sin trabajo o sin ingresos también puede ser un momento complejo para la economía personal. En este caso otra meta podría ser reunir el dinero para cubrir entre dos a tres meses sin ingresos.