Volver atrás
Volver

Qué es Clever y por qué queremos incentivar la inversión en Fondos Mutuos

Para incentivar el ahorro y facilitar la inversión a cualquier chileno que tenga mil pesos.

Clever inversiones

No necesariamente un concepto por ser sencillo, en este caso “plataforma digital de inversiones”, es también simple de entender. ¿Qué implica invertir? ¿La plata sigue siendo mía una vez que la transfiero? ¿Es alguien competente el que administra mi dinero? ¿Cómo funciona esto de las ganancias? Por eso, en este post te explicaremos qué es Clever y, además, cuál es la razón para encontrarnos acá. 


Clever es a fin de cuentas un medio. ¿Para qué? Para incentivar el ahorro y facilitar la inversión a cualquier chileno que tenga mil pesos. Podrá parecer slogan, pero nos tomamos esa consigna muy en serio, y esa es la razón por la cual nuestro objetivo es desarrollar la plataforma más amigable y sencilla.


Pero, ¿cuál es la diferencia entre ahorro e inversión? Aunque parezcan conceptos aislados, la verdad es que no son muy diferentes. El ahorro tradicionalmente lo vemos como un sacrificio: aquello que implica una privación del presente, pensando en el futuro. Quizás esa visión de estar sacrificando “algo presente” es lo que nos impide ahorrar desde un principio. A nosotros nos gusta verlo diferente, algo así como “intercambiar un beneficio inmediato por uno a futuro”. O transferirle a tu yo de unos cuantos años más, si se entiende mejor.


Pero ojo, así como no ahorrar nada es perjudicial, ahorrar demasiado también podría serlo. Mantener una gran cantidad de dinero estancada, hace que esa plata constantemente pierda valor con el paso del tiempo, gracias a ese fenómeno denominado “inflación”. 


Es ahí donde entra la inversión, que vamos a describir de la siguiente forma: ​​es confiar el dinero a expertos, entidades o instrumentos, esperando que su trabajo haga que ese capital o patrimonio aumente. Es decir, no solo me contento con guardar, sino que con hacer trabajar a mi dinero. 


A esto es a lo que se dedica Clever, esa entidad que se encarga de administrar tu dinero para generar futuras rentabilidades. Ponemos especial énfasis en el futuro, porque esto no sucede de un día para el otro como en el casino, sino que es una estrategia de largo plazo. Y bastante menos arriesgada que poner una ficha en el tragamonedas. 

La cosa es así: una vez que tú transfieres dinero a Clever, este va a uno de los tres fondos que diseñamos según el riesgo que mejor se adapte a ti. Está el arriesgado, el moderado y el conservador. Cada uno tiene sus particularidades asociadas a qué tan volátiles son, pero todos comparten el espíritu de invertir en activos financieros múltiples y diversificados: acciones, bonos, instrumentos de deuda, ETF, índices bursátiles, entre otros. Es decir, no pones todos tus huevos en la misma canasta, sino que tu dinero se distribuye en múltiples lugares para maximizar la rentabilidad. 


Pero, quizás incluso con esta explicación, sigues teniendo en tu cabeza ciertos mitos asociados a la inversión que te retienen de dar el paso. Veamos el más común:


“Eso es para ricos, con mi sueldo no puedo hacerlo”. Pues, te contamos algo que te va a servir el resto de tu vida: “No es rico el que más gana, sino el que menos gasta”. Nuestro ingreso, bien administrado y cubriendo las necesidades correctas, es capaz de rescatar un pequeño porcentaje para la inversión, en especial si puedes hacerlo desde $1.000 pesos.


Sin embargo, si estás pensando en invertir, la pregunta que debes hacerte no es en “qué” o “cuánto” invertir, sino “para qué”. La primera condición para lanzarte a invertir no tiene que ver con la cantidad, sino con el propósito. Esa es la variable que define mejor el instrumento, el horizonte temporal y el monto necesario para obtener ese objetivo planteado.  


Mil pesos quizá no será mucho, pero destinar un monto, por pequeño que sea, mes a mes, sí que hace la diferencia. Más aún si tu dinero no está estancado en una cuenta corriente devaluándose mientras aumenta con el costo de la vida, sino que invirtiéndose para ganarle año a año a la inflación. 


Bajo esa premisa es que nos la jugamos por incentivar la cultura del ahorro y la inversión desde Arica a Magallanes. Para ello, una de las gracias de Clever es que somos baratos. Como buen robo advisor, nuestro plus se basa en que, en vez de tener decenas de sucursales y centenares de ejecutivos comprando y vendiendo acciones o bonos en miles de empresas, nosotros usamos robots y algoritmos que realizan las operaciones de forma automática. Como resultado, todo ese ahorro en sucursales y ejecutivos se expresa en que Clever solo te cobra un 1% + IVA (o 1,19% total) por administrar tus inversiones.

Pero ojo, no le dejamos todo a las máquinas. De hecho, aquí viene nuestro segundo plus: somos una startup con el respaldo del Grupo BICE. Eso se traduce en que nuestros fondos son construidos y apoyados por el numeroso equipo de inversiones del BICE, institución que tiene un largo y reconocido recorrido en el mundo financiero. Y lo que es mejor: ese experimentado equipo, que se especializa en gestionar el dinero de los altos patrimonios, son los que velarán porque tus $1.000 empiecen a crecer.

Nosotros no podemos prometer una cifra exacta de rentabilidad, pero sí asegurar que adquirir el hábito del ahorro y la inversión a largo plazo es quizá el mejor consejo financiero que se le puede entregar a cualquier persona.

Por
Equipo Clever